El conjunto europeo sorprendió al equipo casa y a los 61.600 espectadores, que se encontraban en el Arena Corinthians de Sao Paulo, tras un autogol de Marcelo.
El lateral izquierdo del equipo verdeamarelo incurrió en la desafortunada jugada tras un centro del croata Ivica Olic al minuto 11.
Desde el costado izquierdo el experimentado jugador croata envió un centro rastrero que pasó en medio de dos jugadores brasileños, para que finalmente Marcelo la enviara al fondo.
A partir de ese momento, Brasil se fue con todo su arsenal al frente, obligado por el cartel de favorito que pesa sobre su espalda.
Paulinho dio el primer aviso con un potente remate al 20', seguido por otro de Oscar (22'), para dar paso al '10' del equipo.
Y en ese momento, en el que más lo necesitaba su equipo, apareció Neymar. Se quitó una marca, y puso el empate momentáneo de 1-1 con un trallazo desde fuera del área, que entró pegado al palo izquierdo del portero Pletikosa.
Para la segunda mitad del partido Brasil volvió a tomar el control del juego, mientras que Croacia intentaba aprovechar los pocos balones que le quedaban.
Al 69' se dio la supuesta falta de penal cometida por Dejan Lavre , quien recibió tarjeta amarilla, mientras él y sus compañeros reclamaban la acción al réferi central, Yuichi Nishimura.
Desde los once pasos fue donde Neymar puso el segundo tanto (71') e hizo estallar al Arena Corinthians, que lo volvió a ov acionar al 88' cuando Scolari decidió sacarlo del juego.
Con la presión del reloj, Croacia intentó buscar la anotación, e incluso puso en aprietos a los locales, pero la suerte no lo acompañó, aunado a un buen trabajo de Julio César.
En una de esas llegadas, el equipo europeo dejó espacios y se dio un contragolpe brasileño que terminó de sellar la victoria de Brasil 3-1 ante Croacia con un tanto de Oscar al 90', dándole un inicio con el pie derecho a un a de las selecciones llamadas a levantar la copa.
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